Líbano: Un obispo insta a la comunidad internacional a poner fin al conflicto de Tierra Santa
Königstein, Alemania – Un mes después de los atentados de Hamás que provocaron la guerra en Gaza, el arzobispo maronita de Trípoli (Líbano), Youssef Soueif, hace un llamamiento a la comunidad internacional para que intervenga en el conflicto.
Durante una reciente visita a la sede internacional de Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN), el arzobispo Soueif hizo hincapié en la necesidad de una solución justa y duradera tanto para Israel como para Palestina, advirtiendo de que el conflicto podría prolongarse y desencadenar una guerra abierta en la región.
“Que se detenga. Que cese esta guerra. Que termine ya”, dijo un apesadumbrado Arzobispo Soueif. “La comunidad internacional tiene la obligación de aplicar la solución de los dos Estados. Si no, será un conflicto abierto durante décadas, o siglos, porque nadie quiere abandonar su país y su tierra”.
Durante la conversación, el arzobispo de Trípoli, la única región predominantemente suní del Líbano, expresó su profunda preocupación por la situación actual y sus repercusiones en todo Oriente Próximo. “Necesitamos la intervención de actores con influencia en ambos bandos para detener la violencia en Israel y Gaza. La gente está sufriendo terriblemente. Y estamos retrocediendo décadas”.
Los libaneses saben que la violencia no es una solución
El arzobispo también describió el impacto psicológico de la guerra en el pueblo libanés, así como la amenaza que supone para la estabilidad del Líbano y de la región en su conjunto.
“La gente tiene miedo, mucho miedo. En este momento, en Líbano no hay voluntad de guerra. Llevamos 17 años de guerra y la gente de mi país sabe que la violencia no es una solución. Así que esperamos que no haya guerra. Esperamos una solución diplomática”, declaró a la ACN. “Pero sabemos que al final, en este juego geopolítico, otros tomarán las decisiones”.
En respuesta a los reiterados llamamientos a la paz del Papa Francisco, monseñor Soueif aseguró que todas las parroquias y escuelas católicas de su diócesis rezan con las mismas intenciones y que está promoviendo iniciativas interreligiosas con los líderes musulmanes de su región, con los que mantiene una buena relación.
Ayuda para sostener el Líbano
Por último, comentando las declaraciones escritas de los obispos de Oriente Medio, en las que pedían a la comunidad internacional que apoyara al Líbano a través de una crisis política y económica sin precedentes, el arzobispo maronita dijo: “Tenemos que ayudar a mantener al Líbano en pie. Tenemos que restablecer el orden y la confianza internacional en el país. Para ello, necesitamos elecciones. Actualmente, tenemos un primer ministro, pero no hay presidente, por lo que el país no funciona. Y eso es muy peligroso, no solo para Líbano, sino para toda la región”.
Señalando el hecho de que en Líbano hay más refugiados que nativos, entre ellos 2,5 millones de sirios y medio millón de palestinos, el obispo concluyó recordando al mundo que “existe un enorme peligro de que todo se desestabilice. Y el riesgo de emigración masiva podría afectar a Europa si no se resuelve la crisis.”
ACN está comprometida con la Iglesia en el Líbano. En 2022, ACN financió 217 proyectos en el país. Entre ellos, 76 proyectos de ayuda de emergencia, 24 proyectos de construcción y reconstrucción, estipendios de misas para sacerdotes y formación de seminaristas.
—Maria Lozano