El Coliseo de Roma se pone rojo para recordarle al mundo el sufrimiento cristiano
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ESTE SÁBADO, 24 de febrero de 2018, el famoso Coliseo de Roma será bañado en luz roja para conmemorar la sangre de los mártires cristianos, en particular los de nuestro tiempo. Simultáneamente, tanto en Mosul, Irak, como en Alepo, Siria, los edificios prominentes y simbólicos serán iluminados de manera similar; y en Portugal, el Santuario de Cristo Rey, en Almada, con vista a la ciudad de Lisboa, será iluminado así también.
“Agradezco sinceramente esta iniciativa, que es muy relevante en este momento y que vincula la historia pasada con la situación actual. Acontecimientos como la iluminación del Coliseo pueden abrir los corazones y las mentes de las personas, despertar su interés por el tema de la libertad religiosa y animarlos a mostrar una solidaridad mayor con los que sufren de esta manera”. Con estas palabras, Ján Figel, enviado especial de la Unión Europea para la promoción de la libertad religiosa, expresó su apoyo a la iniciativa organizada por Ayuda a la Iglesia que Sufre, la caridad papal internacional.
Entre las personalidades que han anunciado en la ceremonia de iluminación de Roma, se encuentran el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin; el secretario general de la Conferencia Episcopal Italiana, Mons. Nunzio Galantino; y el presidente del Parlamento Europeo, Antonio Tajani.
Ayuda a la Iglesia que Sufre organiza este evento para recordar al mundo el grave sufrimiento cristiano que pasa desapercibido para los grandes medios de comunicación. “Lamentablemente, los medios de comunicación y los políticos no prestan suficiente atención a esta situación. Este silencio e indiferencia solo pueden ayudar a los que cometen estos crímenes y discriminar aún más a sus víctimas”, dijo el Sr. Figel.
Paul Bhatti, hermano de Shahbaz Bhatti, el ministro de Minorías de Pakistán asesinado en marzo de 2011, también ha elogiado la iniciativa. Ha dicho: “No podemos permanecer en silencio ante estas valientes personas que han sacrificado sus vidas por su fe en Cristo y por sus semejantes”.
Durante la ceremonia de conmemoración en la fachada del Coliseo se proyectarán fotografías de varias de las víctimas cristianas de la persecución en nuestro tiempo, incluyendo la del propio Shahbaz Bhatti.
“Mi hermano dio su vida, no solo por los derechos de los cristianos, sino por los de todas las minorías, incluidos los musulmanes”, dijo el Sr. Bhatti, recordando la labor de su hermano, que fue asesinado por sus esfuerzos de modificar las llamadas leyes de blasfemia. “Es un deber rendir homenaje a estos mártires mediante hechos como este y honrar su memoria”, dijo.
En todo el mundo, la falta de respeto por la libertad religiosa y la libertad de culto es “alarmante”, dijo el Sr. Figel, y añadió: “Alrededor del 75% de la población mundial vive actualmente en países donde se producen graves e incluso extremas violaciones de este derecho humano fundamental. Lamentablemente, esta tendencia sigue empeorando. La negación de estos derechos se está viendo exacerbada por la intolerancia, la discriminación y la persecución, incluso hasta el punto del genocidio”.
“Reflexionar sobre el heroísmo de estos nuevos mártires es también un medio para alimentar la fe de Occidente”, dijo Magdalena Santoro, la hermana del padre Andrea Santoro, el sacerdote católico asesinado en Turquía en febrero de 2006. “Si mi hermano se preocupaba por los pocos cristianos que quedan en Turquía, que sufren graves limitaciones en la práctica de su fe, le preocupaba aún más la falta de fe en Occidente. ‘No sabes lo que estás perdiendo‘, solía decirnos cada vez que venía a Italia”.
El Sr. Figel concluyó: “Hay muchas historias de este tipo que son una gran fuente de inspiración para todos nosotros. Una figura particularmente querida para mí es San Maximiliano Kolbe, el sacerdote polaco que ofreció su vida en Auschwitz para salvar la vida de otro hombre”.
El Coliseo se iluminará de rojo a las 6 pm, hora de Roma. La ceremonia será transmitida en vivo en http://acs-italia.org/; #ColosseoRosso
—Marta Petrosillo y María Lozano
