¡La visita del Papa a Sudán del Sur será un motivo de alegría!

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EL ANUNCIO DE QUE EL SANTO PADRE ESTÁ CONSIDERANDO UNA VISITA A SUDÁN, que tendrá lugar en febrero del próximo año, fue recibido “con mucha alegría” por la comunidad católica local, dice la hermana Beta Almendra, misionera en Wau, la segunda ciudad más poblada de este país africano.

Esta alegría es comprensible, después de que la visita que estaba prevista para los primeros días de julio de 2022 se viera aplazada por motivos de salud y debido a que el país sigue requiriendo la atención de la comunidad internacional.

La violencia entre grupos armados y el hambre son dos de los problemas más graves de Sudán del Sur. Se calcula que unos siete millones de personas, un tercio de la población, viven en un estado de inseguridad alimentaria grave, una situación que ya se había agravado con la pandemia del COVID-19, y que se ha agravado aún más con la guerra de Ucrania.

A la espera del Papa Francisco

En declaraciones a la delegación portuguesa de la organización benéfica internacional Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN), Beta Almendra afirma que “hay una gran falta de apoyo internacional”, y que esto ha empezado a notarse sobre el terreno. “Algunas organizaciones no gubernamentales se están retirando del país”, afirma esta monja portuguesa de 52 años.

“Aquí, en Sudán del Sur, todavía no somos estables, no podemos caminar solos”, dice la misionera, citando el ejemplo del hambre. “En una de las escuelas en las que trabajo solíamos dar de comer a los niños una vez al día, y para muchos de los alumnos era el único momento en el que comían judías o arroz, pero la escuela tuvo que reducirlo porque ya no recibíamos la ayuda, y no hay dinero para comprar comida para los alumnos”. Las consecuencias de esta situación ya se manifiestan en el aumento de las enfermedades y en el descenso de las calificaciones.

Aunque la región de Wau está actualmente en paz, a diferencia de otras partes del país, el hambre es una de las principales consecuencias de las turbulencias políticas en Sudán del Sur, que vive una guerra civil desde 2013 entre los partidarios del presidente Salva Kiir, que pertenece a la tribu dinka, y el vicepresidente Riek Machar, que es nuer. La guerra ha causado ya más de 400.000 muertos y más de dos millones de desplazados.

El 15 de septiembre, mientras regresaba a Roma desde Kazajstán, el Papa Francisco anunció que está estudiando la posibilidad de retomar el viaje pospuesto a Sudán del Sur y a la República Democrática del Congo. Le acompañaría el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, primado de la Iglesia Anglicana, que también tiene una fuerte presencia en Sudán del Sur. Welby también estuvo presente en el retiro que el Papa Francisco dirigió en el Vaticano para los líderes políticos sursudaneses, en abril de 2019.

ACN financia varios proyectos en Sudán del Sur. Apoya el trabajo pastoral con los refugiados, la formación de religiosos y catequistas, proporciona ayuda económica a los sacerdotes con los estipendios de las misas y ayuda a financiar su formación pastoral y espiritual. ACN también ha contribuido a la construcción y renovación de infraestructuras para el trabajo pastoral en ciudades como Wau, Juba y Yirol.

—Paulo Aido