Joven viuda apaleada en Pakistán

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Tras ser acusada de blasfemia, una cristiana madre de dos hijos fue acorralada en un campo de Pakistán y apaleada por una turba.

Saima Farhad Gill, que también es viuda y vive en un pueblo cercano a Gojra, fue salvada por la policía y puesta bajo custodia. La acusaron de blasfemia en virtud de la conocida legislación paquistaní.

Los vecinos de Saima afirmaron que habían encontrado documentos con el nombre de su hija, Emma, de 9 años; supuestamente, entre los documentos había páginas arrancadas del Corán. Una turba enfurecida bloqueó las carreteras.

El 7 de agosto, Saima, de unos 33 años, fue acusada en virtud del artículo 295B del Código Penal de Pakistán, en el que la pena por profanación del Corán es la cadena perpetua.

El tío materno de Saima cuida ahora de Emma, así como del hijo de Saima, Saviour, de siete años.

En declaraciones a la organización benéfica católica Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN), que apoya a los cristianos perseguidos y que sufren en todo el mundo, el padre Bonnie Mendes, un destacado sacerdote católico en Pakistán, dijo: «Saima ha tenido una vida dura después de perder a su marido en un accidente de tráfico en septiembre de 2019. Pero ella ha continuado con valentía, dando a sus hijos una educación en una escuela privada. Recemos por su seguridad y por la de sus dos hijos pequeños.»

– John Pontifex