En Nigeria, el número de cristianos recientemente asesinados por los fulanis asciende a 130

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UN GOBERNADOR de Nigeria está acusado de conspiración en lo que un sacerdote describe como un “genocidio” perpetrado por pastores fulani contra un grupo étnico principalmente cristiano.

Un pastor fulani (foto CSN)

El padre Williams Kaura Abba, coordinador de la Coalición contra las matanzas de Kajuru, ha hecho un llamado público para que el Gobierno actúe contra la violencia en la región de Kaduna, en medio de informes que indican que 130 personas de los adara, un grupo étnico principalmente cristiano, han sido “masacradas” y 10.000 desplazadas.

En un informe que envió Ayuda a la Iglesia que Sufre sobre los ataques, el padre Abba pide una investigación dirigida por el Gobierno y acusa al gobernador del Estado de Kaduna, Nasir Ahmad El-Rufai, de complicidad en los ataques, que han sido atribuidos a los pastores islamistas fulani.

El padre Abba dijo: “Tras la reelección [del gobernador El-Rufai], más de 500 terroristas fulanis desbocados dejaron en su camino sangre, muerte y dolor”.

En un discurso pronunciado en una marcha contra las matanzas, celebrada la semana del 18 de marzo en Abuja, la capital nigeriana, el padre Abba dijo: “Pedimos a nuestros compatriotas y a la comunidad internacional que presionen al Gobierno nigeriano para que nos ayude a poner fin al genocidio que se está extendiendo en las comunidades de Adara, en el sur de Kaduna”.

En el discurso, que también envió a Ayuda a la Iglesia que Sufre, añadió: “No podemos permanecer en silencio ante estos espantosos asesinatos y el plan deliberado de aniquilar al pueblo adara, cuyo único crimen es ser nativos”.

Describió el cuidado de un niño de 5 años, que se salvó de la muerte porque una de las armas de los pastores no funcionó. Sin embargo, lo golpearon con un gran palo, dejándolo “literalmente” paralizado. El padre calificó como “un milagro” el hecho de que el niño haya sobrevivido. Además, agregó: “Mientras escribo, este niño no puede estar de pie. La sangre no le circula. El niño perdió a 2 de sus hermanas en el ataque y la madre está luchando por su vida. Este acto fue pura maldad”. El sacerdote también pidió la liberación de los ancianos de Adara, que han sido “injustamente encarcelados”.

Según el padre Abba, la última oleada de lo que insistió fueron ataques no provocados comenzó el 10 de febrero de 2019, cuando 10 personas, incluyendo una mujer embarazada, fueron asesinadas. Sin embargo, estos asesinatos, dijo, no fueron reconocidos por el Gobierno del Estado de Kaduna.

La otra oleada de ataques se produjo después de que el gobernador El-Rufai anunciara en la televisión nacional el descubrimiento de los restos de más de 100 fulanis, víctimas de asesinatos que, según el funcionario, habían sido llevados a cabo por nativos de Adara. Pero el padre Abba dijo que no se había iniciado ninguna investigación y que la acusación seguía sin probarse. Desafió al Gobierno a que presentara los cuerpos.

—Citra Abbott