Las donaciones a Ayuda a la Iglesia que Sufre superan los 145 millones de dólares en 2017

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EN LA PRESENTACIÓN del informe anual 2017 de la fundación, altos funcionarios de Ayuda a la Iglesia que Sufre informaron que la organización recibió poco más de 145 millones de dólares en donaciones. Más del 82,5% de estos ingresos financiaron 5.357 proyectos para ayudar a las Iglesias locales en 149 países. Ayuda a la Iglesia que Sufre tiene oficinas nacionales en 23 países y cerca de 370.000 donantes en todo el mundo.

Aid to the Church in Need supports the suffering and persecuted Church arond the world, last year helping Christians in 149 countries
El cardenal Mauro Piacenza, presidente internacional de Ayuda a la Iglesia que Sufre y Thomas Heine Geldern, nuevo presidente ejecutivo, hablando en la conferencia de prensa de Roma, el 4 de julio de 2018

El resto de los fondos recaudados se destinó a servicios administrativos, campañas de recaudación de fondos, comunicaciones y mercadotecnia, en las que el gasto se ha mantenido al mínimo.

Con la financiación de Ayuda a la Iglesia que Sufre se llevaron a cabo 1.212 proyectos de construcción, que consistieron en la reparación o reconstrucción de capillas, iglesias, catedrales y seminarios, muchos de ellos en regiones devastadas por desastres naturales. 1 de cada 10 sacerdotes (un total de 40.383) recibió ayuda en forma de estipendios de misa, especialmente en África (15.440) y Asia (10.748).

Además, 13.643 seminaristas recibieron ayuda en forma de estipendios, un número mayor que nunca: 1 de cada 9 seminaristas en todo el mundo. La mayoría de estos beneficiarios están radicados en África. También se pagaron los gastos de subsistencia de 12.801 religiosas, la mayoría de ellas miembros de órdenes contemplativas; y muchas otras religiosas también recibieron fondos para su formación.

Para apoyar la misión pastoral de la Iglesia, Ayuda a la Iglesia que Sufre también pagó 424 automóviles, 257 motocicletas, 4 camiones, 3 autobuses y 3 barcos, motocicletas y bicicletas.

El año pasado, una gran parte del apoyo se destinó una vez más a Medio Oriente, donde se envió más de una quinta parte del total de la ayuda, es decir, más de 20 millones de dólares que se invirtieron en proyectos en Siria y especialmente en Irak, donde Ayuda a la Iglesia que Sufre ha estado en primera línea colaborando con los cristianos para que pudieran reasentarse en las Llanuras de Nínive, de donde fueron expulsados por ISIS en el verano de 2014. África encabezó el gasto en Medio Oriente, con cerca de 30 millones de dólares de financiación.

Con casi 11 millones de dólares, Irak está a la cabeza de la lista de países que recibieron apoyo de Ayuda a la Iglesia que Sufre en 2017. La India ocupa el 2°lugar en la lista, con 6,88 millones de dólares, seguida en 3° lugar por Siria (6,8 millones de dólares), en 4°lugar por Ucrania (5,5 millones de dólares), en 5°lugar por el Brasil (4,5 millones de dólares) y en 6° lugar por la República Democrática del Congo (4 millones de dólares).

El 4 de julio de 2018, en la conferencia de prensa celebrada en Roma para presentar el informe anual, el nuevo presidente ejecutivo de Ayuda a la Iglesia que Sufre, Thomas Heine-Geldern, dijo: “En 2017, el foco regional de nuestros proyectos de ayuda fue Medio Oriente y África. Creemos que nuestro trabajo consiste principalmente en apoyar a la Iglesia en aquellos lugares en los que no dispone de los recursos materiales necesarios para llevar a cabo sus actividades pastorales o en los que los cristianos sufren opresión, persecución y violencia”.