Pakistán. Los cristianos, acusados de linchamiento, son liberados

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LOS CRISTIANOS EN TODO Pakistán se regocijan después de que un tribunal absolviera a 40 hombres encarcelados por su presunta participación en el linchamiento de 2 personas en un distrito de las afueras de Lahore, el 29 de enero. Los 40 individuos, casi todos ellos cristianos, gritaron “Aleluya, Alabado sea Dios” mientras el tribunal antiterrorista de Lahore ordenaba su liberación después de casi 5 años en custodia.

También fueron absueltas, bajo fianza, más de 40 personas, después de haber sido acusadas de delitos menores que tuvieron lugar más o menos al mismo tiempo en el distrito de Youhanabad, en Lahore. Todos ellos habían sido arrestados mientras la policía respondía a los disturbios provocados por los atentados suicidas contra 2 iglesias en la mañana del domingo 15 de marzo de 2015, en los que murieron al menos 15 personas y más de 70 resultaron heridas. Inmediatamente después de los atentados, una turba enfurecida mató a 2 hombres sospechosos de ser cómplices de los terroristas.

Hablando con la organización benéfica católica Ayuda a la Iglesia que Sufre, pocas horas después del veredicto de absolución, el padre Emmanuel ‘Mani’ Yousaf describió cómo la emoción se apoderó del tribunal cuando los acusados conocieron la decisión, citando que las pruebas eran insuficientes para demostrar la culpabilidad de los hombres. Las familias de las 2 víctimas de linchamiento recibieron una compensación.

Padre Yousaf

Con la confirmación de que los acusados ya estaban de vuelta en casa con sus familias, el padre Yousaf dijo: “Lo que hemos visto hoy es una noticia maravillosa para Pakistán. En todo el país, la gente ha estado rezando cada día para que el tribunal falle a su favor. Es un gran día para todos nosotros. Los acusados han pasado por un gran trauma y ahora, gracias a Dios, han salido”. Entre los acusados, 2 murieron en la cárcel por maltrato físico y presión para convertirse al islam.

El padre Yousaf, director nacional de la Comisión Nacional para la Justicia y la Paz (NCJP), agradeció a la Ayuda a la Iglesia que Sufre por proporcionar ayuda legal, apoyo que ha sido crucial para el éxito del caso. Además de financiar los honorarios, la caridad patrocinó la escolarización de las familias de los acusados y regalos en Pascua y Navidad.

Dijo: “En primer lugar, estamos muy agradecidos. Con el apoyo de la caridad y las oraciones, todos los acusados están libres. Gracias a la Ayuda a la Iglesia que Sufre, ahora pueden reiniciar sus vidas”. 

El padre también explicó cómo las familias de los acusados habían luchado para cubrir los gastos básicos, ya que los hombres tras las rejas habían sido “los principales proveedores del pan”. También dijo que volver a casa sería difícil para varios de ellos, ya que habían sufrido múltiples pérdidas de familiares cercanos durante su encarcelamiento.

Ayuda a la Iglesia que Sufre se ha comprometido a seguir ayudando a las familias de los acusados, especialmente durante el próximo año.

—John Pontifex