República Democrática del Congo: “Hemos vivido en la Vía Dolorosa durante años”

TRAS LAS SANGRIENTAS MASACRES DE CIVILES en el noreste de la República Democrática del Congo, el obispo de Butembo-Beni ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que escuche los “gritos de sufrimiento” de su país. En un mensaje de vídeo enviado a Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN), el obispo Melchisédech Sikuli Paluku dijo: “Espero que haya ayuda para la gente pobre de aquí. Después de haber vivido en la Vía Dolorosa durante tantos años, nos sentimos como abandonados”.

Desde el 31 de diciembre de 2020, al menos 40 personas han sido brutalmente asesinadas en los alrededores de Beni, la sede del obispo, en ataques presuntamente llevados a cabo por el grupo de milicias rebeldes Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF). Según la prensa, varias personas fueron decapitadas con machetes. El video-mensaje del obispo incluía imágenes de las escenas del crimen que mostraban a las víctimas y la tierra empapada con su sangre.

“Sólo en el último año, unas 1.000 personas fueron asesinadas. Esto ha estado ocurriendo durante los últimos diez años. La situación se ha deteriorado drásticamente desde 2014. Una masacre sigue a la siguiente”, continuó el obispo. Lamentó la indiferencia del gobierno y de los medios de comunicación. “Los medios de difusión Y lo único que les importa a nuestros políticos es conseguir una parte del poder. La gente aquí simplemente no importa, ellos tienen la sensación de que el gobierno ni siquiera existe aquí y que las autoridades estatales nos han abandonado”.

Sin embargo, a pesar de todo, el obispo Paluku aún tiene la esperanza de que la situación mejore. “Esperamos que, en el futuro, el Estado ponga más empeño en acabar con las masacres”.

Durante años, las ADF, un grupo originario de Uganda, han asolado las zonas fronterizas entre la República Democrática del Congo y la vecina Uganda, una zona especialmente rica en recursos. Durante este tiempo, el ejército congoleño y la misión MONUSCO de mantenimiento de la paz de la ONU, no han sido capaces de establecer la paz en la zona. La región alrededor de Beni, en la provincia de Kivu Norte, se considera el epicentro de la violencia. Según las organizaciones de derechos humanos, el este del Congo sufre la crisis humanitaria más duradera de África.

—Oliver Maksan