En Irak, los cristianos regresan a casa también por el bien de los niños de la diáspora

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El padre caldeo Thabet Habib Youssef, pastor de la Iglesia San Addai en la ciudad cristiana de Karamles, Irak, ayuda a supervisar la reconstrucción y reparación de las casas cristianas y las propiedades de la Iglesia. Habló con Ayuda en la Iglesia que Sufre sobre las perspectivas de los cristianos que han regresado a sus hogares en las Llanuras de Nínive después de haberse visto forzados a exiliarse en Kurdistán por la invasión de ISIS en el verano de 2014.

“En el pasado, hemos sido objeto de muchos ataques e invasiones. Pero cada vez hemos regresado como fieles y auténticos creyentes; hemos reafirmado nuestras raíces. La presencia cristiana en Irak puede continuar, aunque las cosas no serán como antes de 2014”.

Christians in the Middle East are under siege; Aid to the Church in Need helps preserve Christianity in the region, also for the sake of the children of the diaspora
El padre Thabet estudia los daños en Karamles

“El discurso cristiano siempre se ha centrado más en la identidad nacional que en la identidad religiosa. La identidad nacional es el vínculo común que hace posible la conversación y la coexistencia, la aceptación del otro. Nuestra misión como clérigos profundizar la fe entre los creyentes no nos impide hablar directamente con los no cristianos sobre temas de importancia nacional, sobre temas que afectan a todos los iraquíes”.

“Hemos pedido repetidamente una legislación que garantice la seguridad y la privacidad de los cristianos. Hasta el día de hoy, trabajamos en torno a leyes más antiguas que no protegen las áreas en peligro. Los cambios demográficos son una amenaza para los cristianos en las Llanuras de Nínive, y el Gobierno iraquí seguirá siendo deficiente si el problema no se resuelve con leyes firmes y estables”.

“Necesitamos organizar una intervención global que presione al Gobierno iraquí para que cumpla con todas las decisiones emitidas por las Naciones Unidas y sus circunscripciones”.

El padre Thabet frente a la iglesia de St. Adday

“Muchos cristianos habían perdido la esperanza de regresar. Hoy, 330 familias han regresado a Karamles, y hasta ahora hemos reparado 382 de las 754 casas cristianas dañadas en la ciudad. Hemos restaurado el Santuario de Santa Bárbara y la Iglesia de San Addai, que había sido parcialmente quemada, y también hemos reparado la Iglesia de la Virgen María. Realizamos tantos servicios básicos como podemos. Hemos respondido a la escasez de agua y hemos proporcionado apoyo a los agricultores en las tierras destruidas por la actividad militar”.

“No sabemos si todas las familias volverán a las Llanuras de Nínive, pero creemos que todos los cristianos tienen el deber de dar forma a la identidad de la región. Queremos vivir en nuestra tierra, y pedimos que nuestro pueblo esté con nosotros. Debemos preservar nuestra identidad e historia por el bien de los niños de la diáspora. Nuestra presencia duradera aquí no debe ser comprometida”.

Ayuda a la Iglesia que Sufre ha ayudado con el retorno de unos 40.000 cristianos a sus comunidades en las Llanuras de Nínive.

 —Ragheb Elias Karash