Pakistán: la niña cristiana secuestrada está a salvo

ARZOO RAJA, una niña católica de 13 años de Karachi, en el sur de Pakistán, que fue secuestrada y obligada a casarse, está a salvo. Como informaron fuentes de los medios de comunicación de Pakistán, tras una audiencia celebrada el 2 de noviembre, el Tribunal Superior de Sindh ordenó a la policía que rescatara a la niña de la familia de su presunto secuestrador y la llevara a un refugio para mujeres. El tribunal también ordenó una investigación para determinar la edad de la joven cristiana. Ayuda a la Iglesia que Sufre se hará cargo de los honorarios del abogado de Arzoo y mantendrá a su familia.

Como han informado fuentes pakistaníes, Ali Azhaar, el hombre musulmán de 44 años que presuntamente secuestró a la niña el 13 de octubre y luego la obligó a convertirse y a casarse con él, ha sido detenido. 2 hermanos y 1 amigo del acusado han sido arrestados y acusados como cómplices. La próxima audiencia del tribunal se fijó para el 5 de noviembre.

“Estamos muy contentos con este afortunado y rápido desarrollo en el caso de Arzoo Raja”, dijo Regina Lynch, directora de proyecto de Ayuda a la Iglesia que Sufre Internacional. “La reciente decisión representa un éxito para el estado constitucional de Pakistán y para las muchas personas de todos los grupos religiosos que están trabajando para poner fin a los matrimonios forzados. Esperamos y tenemos fe en que la ley y la justicia volverán a prevalecer en las próximas audiencias. Lo importante ahora es que la niña reciba una buena atención de acuerdo con lo que ha vivido. Ayuda a la Iglesia que Sufre está colaborando donde puede”.

Según las organizaciones de derechos humanos, cada año en Pakistán se secuestra y obliga a que unas 1.000 mujeres y niñas cristianas e hindúes se casen. En 2014 se aprobó en Pakistán una ley que restringe los matrimonios de niños, que da a los miembros de la familia y a los afectados la base jurídica para actuar ante los tribunales si se producen estos incidentes.

El caso de Arzoo Raja provocó numerosas protestas de cristianos, musulmanes e hindúes. La ministra de Derechos Humanos de Pakistán, Shireen Mazari, intervino en el caso. Como informó el diario paquistaní Dawn, el gobernador de la provincia de Sindh, Imran Ismail, declaró en una reunión con miembros de las minorías religiosas: “No se puede transigir en los casos de matrimonio de menores”.

—Tobias Lehner